“Dejar que repique la libertad” Sostenemos estas verdades evidentes que todos los hombres son creados igual, que son dotados por su creador, con ciertos derechos inalienables, que entre estos son la vida, libertad y la búsqueda de la felicidad.

Declaración de Independencia


El pueblo americano, desde su nacimiento como nación cree intensamente en los ideales de la libertad, porque esta significa los derechos individuales que todo el pueblo debe gozar, por ello los americanos están orgullosos de su libertad y están dispuestos a defenderla si es necesario.


La Declaración de Independencia, estableció que el individuo es una persona de mucho valor e importancia, ya que unido a otros más van a formar el pueblo y este es quien domina.


El primer derecho, o libertad garantizada, es libertad de religión, este derecho está garantizado para todos los americanos en la primera enmienda, esta garantiza a cada ciudadano su libertad en venerar o practicar cualquier religión que escoja.


La declaración de los derechos contiene a las primeras diez enmiendas de la constitución, ya descritas en el Acta de Independencia, pues cada individuo debe recibir una educación igual, trato en restaurantes y hoteles igual, así como viajar en tren o autobús.


Hace unos días platicaba con un veterano de Corea, y me explicaba que ésta es una nación de gran diversidad, pues la hemos estado formando con muchos tipos de gente, nos hemos propuesto estar unidos a pesar de que somos todos diferentes, nuestro sueño principal ha sido aprender a vivir juntos con libertad y justicia para todos. Estos términos significan el trabajar sólo 8 o 9 horas diarias, en lo que yo quiero, leer y escribir lo que quiera, así como estudiar lo que desee y buscar mi propio destino.


El pueblo de los Estados Unidos, con el fin de formar una Unión más perfecta, establecer la justicia, asegurar la tranquilidad nacional, proporcionar los medios para la defensa común, fomentar el bienestar general y asegurar la bendición que representa la libertad para nosotros y nuestra posteridad creó La Constitución.


La Independencia otorgó el derecho de expresar ideas y opiniones libremente sin el temor de ser callados por la fuerza y el poder, y no como en algunos países que cuando el ciudadano habla las armas se disparan solas pero sin querer encuentran un cráneo o un pulmón, seguramente no se dispararían solas si hubiera “libertad de expresión”.


La Declaración de Independencia, que se firmó aquel lejano 4 de julio de 1976, en Filadelfia y por la que tantos hombres han ofrendado su vida a través de la historia de este gran país no debe de pasar como una fecha más del calendario que nos sirve para descansar, no, que ésta fecha sea el inicio de una nueva reflexión y lucha contra todos aquellos enemigos de la sociedad que hacen hasta lo imposible por destruirlo, salvemos a nuestros jóvenes de la esclavitud que causa el alcohol, las drogas, la deserción escolar, entonces seremos libres y viviremos en un país MEJOR.